Familiares y amigos de la víctima, una adolescente de 16 años, reclamaron durante dos días con marchas la aprehensión del acusado. Anoche, alrededor de las 22.30, fue apresado por personal del Gabinete de Investigación de la Comisaría Segunda, con lo que se descomprimió una fuerte presión. Hubo enfrentamientos con la policía. Un jefe policial resultó herido en la cabeza.
Un caso de abuso sexual con acceso carnal (agravado) -tal como está caratulada la causa que se instruye en la Fiscalía Nº 6, de la doctora Vanina Lisazo- está siendo el desencadenante de un conflicto que se traduce a través de las redes sociales entre sectores vinculados a la víctima y al acusado, mayor de edad, con ribetes inesperados.
Anoche se produjo una refriega a la altura de calles Rivadavia y Chilavert.
Un grupo de personas, integrado por familiares y amigos de la víctima, marchaban en dirección al barrio FONAVI, donde vive el abogado del acusado, mencionándose que en su casa estaría resguardado el presunto abusador.
En principio, la agresión fue hacia el personal policial apostado en las inmediaciones, resultando herido el subcomisario Machuca, a cargo de Infantería. Versiones indicaron que la agresión no partió de la manifestación sino de otros no identificados apostados en las inmediaciones.
La situación se descomprimió cuando se conoció que personal del Gabinete de Investigación de la Comisaría Segunda detuvo al acusado en una vivienda ubicada en el barrio San Martín.
Como consecuencia del malestar que genera esta situación, anoche se produjeron incidentes, donde móviles y personal policial fueron blancos con piedras y algunos botellazos, quedando herido un efectivo con un traumatismo en la cabeza, por lo que tuvo que ser trasladado hasta el Hospital Interzonal ‘Abraham Piñeyro’ para su atención.
Familiares de la adolescente fueron derivadas hasta la sede de la Comisaría con asiento en el barrio Belgrano para comprobar la veracidad de la aprensión, lo que permitió que se descomprimiera la situación en inmediaciones del FONAVI. Todo dentro de una tensa calma.
Allanamientos
Familiares y amigos de la jovencita de 16 años realizaron en 24 horas dos marchas pidiendo justicia. Asimismo, la policía realizó dos allanamientos en el barrio San Martín para lograr aprehender al joven acusado (se trata de un patovica). En ambos procedimientos debió montarse un importante operativo de prevención en torno a la vivienda del supuesto abusador, donde decenas de personas vinculadas a la adolescente ejercieran presión para que se produzca la detención. Una de las razones de la tensión fue que no había sido aprehendido el hombre sindicado como el autor del presunto abuso, y sobre el cual pesaba una orden de detención ordenada por la jueza de Garantías María Laura Durante.
En el primero de los allanamientos la policía secuestró de la vivienda del patovica ropa de cama, calzados y prendas de vestir.
El hecho que derivó en esta situación ocurrió el domingo último cuando se denunció el abuso del que resultó víctima la joven de 16 años, quien identificó a su sometedor .
Al respecto, los investigadores sostienen que hasta ahora hay indicios del abuso, aunque no se habría acreditado la presencia de semen durante la pericia a que fue sometida la víctima. Pero sí habría otras pruebas como para vincular al presunto responsable del abuso con el hombre señalado por los familiares y amigos de la menor.
Estaría acreditada como prueba la violencia ejercida sobre la chica, y otro indicio importante que sería tenido en cuenta por la fiscal Lisazo, tiene que ver los mensajes levantados de Facebook escritos por el hombre y dirigidos a la víctima, donde de alguna manera reconocería relaciones con la jovencita.
Un caso de abuso sexual con acceso carnal (agravado) -tal como está caratulada la causa que se instruye en la Fiscalía Nº 6, de la doctora Vanina Lisazo- está siendo el desencadenante de un conflicto que se traduce a través de las redes sociales entre sectores vinculados a la víctima y al acusado, mayor de edad, con ribetes inesperados.
Anoche se produjo una refriega a la altura de calles Rivadavia y Chilavert.
Un grupo de personas, integrado por familiares y amigos de la víctima, marchaban en dirección al barrio FONAVI, donde vive el abogado del acusado, mencionándose que en su casa estaría resguardado el presunto abusador.
En principio, la agresión fue hacia el personal policial apostado en las inmediaciones, resultando herido el subcomisario Machuca, a cargo de Infantería. Versiones indicaron que la agresión no partió de la manifestación sino de otros no identificados apostados en las inmediaciones.
La situación se descomprimió cuando se conoció que personal del Gabinete de Investigación de la Comisaría Segunda detuvo al acusado en una vivienda ubicada en el barrio San Martín.
Como consecuencia del malestar que genera esta situación, anoche se produjeron incidentes, donde móviles y personal policial fueron blancos con piedras y algunos botellazos, quedando herido un efectivo con un traumatismo en la cabeza, por lo que tuvo que ser trasladado hasta el Hospital Interzonal ‘Abraham Piñeyro’ para su atención.
Familiares de la adolescente fueron derivadas hasta la sede de la Comisaría con asiento en el barrio Belgrano para comprobar la veracidad de la aprensión, lo que permitió que se descomprimiera la situación en inmediaciones del FONAVI. Todo dentro de una tensa calma.
Allanamientos
Familiares y amigos de la jovencita de 16 años realizaron en 24 horas dos marchas pidiendo justicia. Asimismo, la policía realizó dos allanamientos en el barrio San Martín para lograr aprehender al joven acusado (se trata de un patovica). En ambos procedimientos debió montarse un importante operativo de prevención en torno a la vivienda del supuesto abusador, donde decenas de personas vinculadas a la adolescente ejercieran presión para que se produzca la detención. Una de las razones de la tensión fue que no había sido aprehendido el hombre sindicado como el autor del presunto abuso, y sobre el cual pesaba una orden de detención ordenada por la jueza de Garantías María Laura Durante.
En el primero de los allanamientos la policía secuestró de la vivienda del patovica ropa de cama, calzados y prendas de vestir.
El hecho que derivó en esta situación ocurrió el domingo último cuando se denunció el abuso del que resultó víctima la joven de 16 años, quien identificó a su sometedor .
Al respecto, los investigadores sostienen que hasta ahora hay indicios del abuso, aunque no se habría acreditado la presencia de semen durante la pericia a que fue sometida la víctima. Pero sí habría otras pruebas como para vincular al presunto responsable del abuso con el hombre señalado por los familiares y amigos de la menor.
Estaría acreditada como prueba la violencia ejercida sobre la chica, y otro indicio importante que sería tenido en cuenta por la fiscal Lisazo, tiene que ver los mensajes levantados de Facebook escritos por el hombre y dirigidos a la víctima, donde de alguna manera reconocería relaciones con la jovencita.