Una comparación de registros térmicos asemeja al enero 2014 con el de 1955, que fue denominado “el año del fuego” en esta zona del mapa. Además, se mantiene la tendencia de una evolución ascendente de la temperatura a lo largo de las últimas ocho décadas.
El enero 2014 es uno de los más calientes de los últimos sesenta años. Lo indican las estadísticas de la estación meteorológica local, cuyos registros lo ponen en una posición de igualdad con el primer mes de 1955, que por la ferocidad de sus marcas térmicas fue denominado “el año del fuego”.
“Está dentro de los más calurosos de los últimos sesenta años”, añadió Luis Lanare, meteorólogo de la ciudad de Junín.
Uno de los factores que explica tal posicionamiento del mes en curso es que los frentes de aire cálido permanecieron en la atmósfera más tiempo del que es habitual para el período estival, dado que se mantuvieron por una semana.
Otro dato a tener en cuenta es que haciendo un repaso por la historia del clima se puede notar que sólo cuatro eneros superaron los 40 grados de temperatura (sin tomar en cuenta la sensación térmica). Ellos fueron los de 1988, 1995, 2006 y 2012.
Carácterísticas climáticas
La región posee un clima templado pampeano, que es una variación del subtropical húmedo donde la estación más cálida es también la más lluviosa. Se da principalmente en la provincia de Buenos Aires, centro y sur de Santa Fe y Córdoba, centro y este de La Pampa y centro y sur de Entre Ríos. Se diferencia de otras zonas de clima subtropical húmedo, como el sudeste de Estados Unidos y de China, por la menor oscilación térmica anual: el clima pampeano presenta veranos cálidos pero inviernos suaves donde son raras las nevadas.
El verano es caluroso al mediodía y en las primeras horas de la tarde; las mañanas y tardes son agradables y las noches templadas. En otoño el tiempo es agradable al mediodía y en las primeras horas de la tarde; fresco durante el resto del día y frío durante la noche. El invierno se caracteriza por días frescos y noches frías. En la primavera, el tiempo es agradable durante el día y las noches son frescas a frías.
En la región se posee una temperatura media anual de 15,7 ºC, tomando como referencia el período 1934-2012. Si promediamos los últimos 50 años, la media fue de 15,8 ºC; en los últimos 25 años fue de 15,9 ºC, y en los últimos 10, de 16,0 ºC.
La máxima media anual es de 22,4 ºC y la mínima 10,3 ºC. En verano la máxima media es de 29 ºC y la mínima media de 16 ºC, mientras en el invierno los valores son de 15 ºC y 4 ºC respectivamente.
El récord de temperatura máxima fue de 43,9 ºC y se registró el 11 de enero de 1955. La mínima histórica se alcanzó el 14 de junio de 1967, con -9,2 ºC.
La máxima temperatura media anual fue de 16,6 ºC y se registró en 2001. La mínima fue de 14,6 ºC y corresponde a 1956. En el 92% de los años comprendidos entre 1934 y 2012, la temperatura media anual se mantuvo en un rango de ±5% de la media.
La máxima temperatura media mensual se registró en enero de 1957 con 24,9ºC. La mínima corresponde a julio de 1967, con 4,9 ºC.
Los cuidados a tener en cuenta
Los especialistas no dudan: el cambio climático ya llegó y lo hizo para quedarse. En base a esta certeza -reforzada esta semana por nuevos estudios de la agencia espacial estadounidense (NASA)- describen un escenario en el que los fenómenos meteorológicos se hacen cada vez más intensos. Y consideran que esta situación va a tener una fuerte repercusión en la vida cotidiana, provocando a futuro profundas transformaciones en el espacio urbano (a partir de la necesidad de adaptarlo a nuevas condiciones) y hasta en la salud, frente al riesgo de aparición de nuevas enfermedades hoy propias de países tropicales. Por lo pronto, la caída de rayos en la costa atlántica ya cambió el paisaje de las playas marplatenses: ayer, por disposición comunal los balnearios de la ciudad sumaron una bandera cuya función específica es la de alertar a los bañistas en caso de tormenta eléctrica. A mediados de semana, el ministerio de Trabajo de la Provincia ya había exigido a los paradores marplatenses la inclusión de pararrayos, una medida que se extendería después a otras localidades balnearias de la costa.
El meteorólogo platense Juan Manuel Horler, presidente del Centro Argentino de Meteorólogos atribuyó al cambio climático la ola de calor y los fenómenos meteorológicos extremos registrados en los últimos días.
“Estamos en un verano récord”, dijo el especialista y agregó: “es el cambio climático lo que genera que todo sea extremo, tanto calor como frío; las tormentas son más severas al no disminuir la temperaturas en la noche y las nubes están más altas, con mayor probabilidad de tormentas eléctricas”.
El enero 2014 es uno de los más calientes de los últimos sesenta años. Lo indican las estadísticas de la estación meteorológica local, cuyos registros lo ponen en una posición de igualdad con el primer mes de 1955, que por la ferocidad de sus marcas térmicas fue denominado “el año del fuego”.
“Está dentro de los más calurosos de los últimos sesenta años”, añadió Luis Lanare, meteorólogo de la ciudad de Junín.
Uno de los factores que explica tal posicionamiento del mes en curso es que los frentes de aire cálido permanecieron en la atmósfera más tiempo del que es habitual para el período estival, dado que se mantuvieron por una semana.
Otro dato a tener en cuenta es que haciendo un repaso por la historia del clima se puede notar que sólo cuatro eneros superaron los 40 grados de temperatura (sin tomar en cuenta la sensación térmica). Ellos fueron los de 1988, 1995, 2006 y 2012.
Carácterísticas climáticas
La región posee un clima templado pampeano, que es una variación del subtropical húmedo donde la estación más cálida es también la más lluviosa. Se da principalmente en la provincia de Buenos Aires, centro y sur de Santa Fe y Córdoba, centro y este de La Pampa y centro y sur de Entre Ríos. Se diferencia de otras zonas de clima subtropical húmedo, como el sudeste de Estados Unidos y de China, por la menor oscilación térmica anual: el clima pampeano presenta veranos cálidos pero inviernos suaves donde son raras las nevadas.
El verano es caluroso al mediodía y en las primeras horas de la tarde; las mañanas y tardes son agradables y las noches templadas. En otoño el tiempo es agradable al mediodía y en las primeras horas de la tarde; fresco durante el resto del día y frío durante la noche. El invierno se caracteriza por días frescos y noches frías. En la primavera, el tiempo es agradable durante el día y las noches son frescas a frías.
En la región se posee una temperatura media anual de 15,7 ºC, tomando como referencia el período 1934-2012. Si promediamos los últimos 50 años, la media fue de 15,8 ºC; en los últimos 25 años fue de 15,9 ºC, y en los últimos 10, de 16,0 ºC.
La máxima media anual es de 22,4 ºC y la mínima 10,3 ºC. En verano la máxima media es de 29 ºC y la mínima media de 16 ºC, mientras en el invierno los valores son de 15 ºC y 4 ºC respectivamente.
El récord de temperatura máxima fue de 43,9 ºC y se registró el 11 de enero de 1955. La mínima histórica se alcanzó el 14 de junio de 1967, con -9,2 ºC.
La máxima temperatura media anual fue de 16,6 ºC y se registró en 2001. La mínima fue de 14,6 ºC y corresponde a 1956. En el 92% de los años comprendidos entre 1934 y 2012, la temperatura media anual se mantuvo en un rango de ±5% de la media.
La máxima temperatura media mensual se registró en enero de 1957 con 24,9ºC. La mínima corresponde a julio de 1967, con 4,9 ºC.
Los cuidados a tener en cuenta
Los especialistas no dudan: el cambio climático ya llegó y lo hizo para quedarse. En base a esta certeza -reforzada esta semana por nuevos estudios de la agencia espacial estadounidense (NASA)- describen un escenario en el que los fenómenos meteorológicos se hacen cada vez más intensos. Y consideran que esta situación va a tener una fuerte repercusión en la vida cotidiana, provocando a futuro profundas transformaciones en el espacio urbano (a partir de la necesidad de adaptarlo a nuevas condiciones) y hasta en la salud, frente al riesgo de aparición de nuevas enfermedades hoy propias de países tropicales. Por lo pronto, la caída de rayos en la costa atlántica ya cambió el paisaje de las playas marplatenses: ayer, por disposición comunal los balnearios de la ciudad sumaron una bandera cuya función específica es la de alertar a los bañistas en caso de tormenta eléctrica. A mediados de semana, el ministerio de Trabajo de la Provincia ya había exigido a los paradores marplatenses la inclusión de pararrayos, una medida que se extendería después a otras localidades balnearias de la costa.
El meteorólogo platense Juan Manuel Horler, presidente del Centro Argentino de Meteorólogos atribuyó al cambio climático la ola de calor y los fenómenos meteorológicos extremos registrados en los últimos días.
“Estamos en un verano récord”, dijo el especialista y agregó: “es el cambio climático lo que genera que todo sea extremo, tanto calor como frío; las tormentas son más severas al no disminuir la temperaturas en la noche y las nubes están más altas, con mayor probabilidad de tormentas eléctricas”.