Un violento episodio se registró en las últimas horas entre inspectores de la Municipalidad de Junín y un comerciante que, al parecer molesto por ser visitado por los agentes para realizar un operativo, los agredió físicamente.
Fuentes policiales informaron que los empleados del gobierno local estaban cumpliendo con un recorrido de rutina por diferentes locales de la ciudad y cuando estaban en el interior de una panadería, por motivos no especificados, fueron atacados a golpes de puño por el dueño del lugar.
Uno de los inspectores fue retirado del comercio en cuestión –está ubicado en el barrio Mayor López- con heridas de consideración en el rostro y en el torso.
Fue tal el escándalo que se género que debió intervenir la Policía, y posteriormente se procedió a la clausura del negocio.
Según se supo, del operativo participaba personal de la Dirección Bromatología para realizar el control de higiene correspondiente.
Cuando promediaba la inspección, y al notar que le iban a anular la góndola de bebidas alcohólicas por encontrarse vencida la autorización correspondiente, la reacción del comerciante no se hizo esperar. Tras proferir algunos improperios, golpeó con su puño a uno de los funcionarios en la cabeza, más precisamente a la altura del oído.
Uno de los operarios atacados sufrió marcas en uno de sus ojos, mientras que su compañero sufrió las peores consecuencias y todavía está bajo controles médicos, dado que permanece con vómitos y mareos.
La propia jefa de Inspección General, Graciela Barco, fue quien radicó la denuncia en Comisaría Segunda.
(Fuente: Diario Democracia)