El Santoral y la Liturgia correspondientes al viernes 18 de abril son los siguientes:
La cristiandad revive hoy la Pasión y Muerte de Jesús, el Redentor. El arresto en el Huerto de los Olivos, la coronación de espinas, la flagelación, la condena a muerte, la vía dolorosa hasta el Calvario llevando la Cruz a cuestas, la crucifixión, la agonía y muerte de Jesús, son otros tantos momentos de reflexión del pueblo cristiano en este día.
Liturgia
La Iglesia hoy centra toda su atención en la muerte de Jesús. Las celebraciones litúrgicas se desarrollan en un clima de austeridad, pero resaltan en especial la esperanza y el carácter
redentor de la inmolación de Cristo. Se lee un pasaje del libro de Isaías (52,13 - 53,12) en el que se preanuncia la Pascua de Jesús; la Carta a los Hebreos (4,14-16; 5,7-9) donde se dice: "Aprendió qué significa obedecer y llegó a ser causa de salvación eterna para todos los que le obedecen"; y por último se da lectura a la "Pasión de Nuestro Señor Jesucristo", según San Juan.
Hacia las horas del anochecer se realiza el ejercicio del Vía Crucis o Camino de la Cruz, que tiene lugar o bien en los templos, o por las calles adyacentes, durante el cual se medita sobre los diversos pasajes de la Pasión de Jesús.
Ayuno y abstinencia. El Viernes Santo es uno de los dos días del año en que la Iglesia prescribe ayuno y abstinencia. El ayuno, que obliga a los cristianos desde los 21 hasta los 60 años de edad, consiste en hacer una sola comida importante en el día, que puede ser al mediodía o a la noche. La abstinencia consiste en no comer carne, o privarse de algo, o hacer un acto de misericordia o de piedad.
Colecta para Tierra Santa. Por pedido especial del Santo Padre, durante las celebraciones del Viernes Santo se realiza en todos los templos una colecta para los cristianos que viven con grandes dificultades en Tierra Santa.
La cristiandad revive hoy la Pasión y Muerte de Jesús, el Redentor. El arresto en el Huerto de los Olivos, la coronación de espinas, la flagelación, la condena a muerte, la vía dolorosa hasta el Calvario llevando la Cruz a cuestas, la crucifixión, la agonía y muerte de Jesús, son otros tantos momentos de reflexión del pueblo cristiano en este día.
Liturgia
La Iglesia hoy centra toda su atención en la muerte de Jesús. Las celebraciones litúrgicas se desarrollan en un clima de austeridad, pero resaltan en especial la esperanza y el carácter
redentor de la inmolación de Cristo. Se lee un pasaje del libro de Isaías (52,13 - 53,12) en el que se preanuncia la Pascua de Jesús; la Carta a los Hebreos (4,14-16; 5,7-9) donde se dice: "Aprendió qué significa obedecer y llegó a ser causa de salvación eterna para todos los que le obedecen"; y por último se da lectura a la "Pasión de Nuestro Señor Jesucristo", según San Juan.
Hacia las horas del anochecer se realiza el ejercicio del Vía Crucis o Camino de la Cruz, que tiene lugar o bien en los templos, o por las calles adyacentes, durante el cual se medita sobre los diversos pasajes de la Pasión de Jesús.
Ayuno y abstinencia. El Viernes Santo es uno de los dos días del año en que la Iglesia prescribe ayuno y abstinencia. El ayuno, que obliga a los cristianos desde los 21 hasta los 60 años de edad, consiste en hacer una sola comida importante en el día, que puede ser al mediodía o a la noche. La abstinencia consiste en no comer carne, o privarse de algo, o hacer un acto de misericordia o de piedad.
Colecta para Tierra Santa. Por pedido especial del Santo Padre, durante las celebraciones del Viernes Santo se realiza en todos los templos una colecta para los cristianos que viven con grandes dificultades en Tierra Santa.