Docentes, estudiantes y empleados no docentes participaron en la UNNOBA de una jornada de trabajo para discutir los resultados de la evaluaciones externas realizadas por la Red Internacional de Evaluadores (RIEV) y por la Comisión Nacional de Evaluación y Acreditación Universitaria (CONEAU).
La actividad estuvo dividida en cuatro Mesas: Académica, Investigación, Extensión, y Gobierno y Gestión. Estas Mesas, en las que participaron los integrantes de la comunidad universitaria, discutieron a lo largo de toda la jornada sobre distintos temas: los resultados de la evaluación, la comunicación en la Universidad, la articulación entre Escuelas y Departamentos.
La apertura de la jornada estuvo a cargo de la secretaria Académica, Florencia Castro, quien se refirió a los resultados de las evaluaciones externas. Por su parte, el rector hizo un planteo general de los objetivos de las evaluaciones y de la Jornada: “Queremos volver a hacer lo que se hizo hace diez años: poner en valor la perspectiva política institucional y el rumbo de la Universidad, y no reproducir las prácticas que llevamos a cabo todos los días. Nos tomamos estos momentos para reflexionar en torno a lo que hemos hecho y, particularmente, en torno a lo que viene”.
“Que hayamos sido idóneos en esta primera etapa no quiere decir que sigamos siendo eficientes en esta segunda etapa. A su vez, los graduados van a imprimir el carácter definitivo a esta universidad. Ellos tienen que tener en claro cuál es el derrotero de esta próxima década”, añadió el rector de la UNNOBA.
En la apertura de la Jornada el doctor Tamarit hizo hincapié en la necesidad de discutir entre los actores “abiertamente”: “Así lo hicimos hace diez años y así salió bien”.
Para la máxima autoridad universitaria, los evidentes logros de la institución en sus primeros años de vida pueden frenar su futuro desarrollo: “La UNNOBA tiene un altísimo prestigio ganado por lo que hacen ustedes todos los días. Esto puede ser un ancla contraproducente, si nos quedamos con lo que se hizo. La convocotaria ahora es discutir sobre el futuro, lo que viene”.
El desafío que el rector se planteó en el contexto de las universidades públicas refiere, especialmente, a la calidad: “Tenemos que insertarnos en un contexto de competencia por la calidad, por la pertinencia, el acercamiento a la comunidad, la respuesta a los problemas que suceden día a día”.
Al mismo tiempo, definir el perfil de la institución para los próximos años implica pensar en qué docentes y no docentes son necesarios para ese fin: “Hemos iniciado un debate en relación a la formación de recursos humanos para la próxima década para pensar qué va a requerir la institución de sus recursos humanos, tanto docentes como no docentes, y qué acciones vamos a generar para lograr ese objetivo. Que no ocurra que los docentes y los no docentes determinen el perfil de la universidad, sino que institucionalmente establezcamos el perfil y tengamos los recursos humanos adecuados para ese desarrollo institucional”.