La irrupción de la red social que adaptó sus características y hoy se convierte en una herramienta muy valiosa para el trabajador de prensa.
Como lo define Mariano Cebrián, «un Cibermedio es entendido como el proceso que va de un productor-emisor de contenidos y servicios informativos mediante estrategias y técnicas periodísticas especificas y adecuadas a las exigencias de la plataforma Internet y con la potencialidad incorporada por ésta como el uso integrado de varios sistemas expresivos: escrito, gráfico, icónico, auditivo, audiovisual y multimedia, hasta llegar a unos usuarios que pueden seguir, manejar o producir otras informaciones y entablar diálogo o intercambiarse los papeles con el emisor”.
Twitter es una herramienta que no nace de o para el periodismo, pero adapta sus características a el. La interactividad, que convierte a la información en conocimiento colectivo, hipertextualidad, que conduce la construcción del conocimiento por diversos caminos de información contiguos, y la instantaneidad, como situación de versatilidad y recepción de la información de forma eficaz.
El periodismo era, tradicionalmente, concebido como un proceso más fabricado, de días enteros en las calles en busca de la noticia, en el que cada periodista era como una república independiente y las noticias pertenecían a quienes las buscaban, no a quienes las esperaban. Sin embargo, hoy en día no es así. Twitter rompe ese esquema de tiempo y espacio que respetan o exigen las formas del periodismo tradicional. «El espacio para la prensa es un componente clave de la valoración y tratamiento de la información», en donde en materia de tiempo, la exposición de la información a la audiencia es mediada por una concepción periódica: diario, semanal, mensual. Sin embargo, como afirma Sara Plaza, «Twitter tiene a los periodistas en todo momento, si por periodistas se entiende a personas que están en el lugar de los hechos y pueden informar de lo que está sucediendo de forma instantánea. Ese es el término que actualmente se utiliza para referirse a los periodistas ciudadanos y donde Twitter se está convirtiendo en uno de los medios más importantes».
Jeff Jarvis la respalda en The Impact of Twitter on Journalism, cuando dice que «las acciones del periodista en este medio ya pueden ser presentadas o hechas por quien sea, puesto que el periodismo se convierte en un proceso de colaboración que no tiene como fin hacer un producto, sino proveer un servicio». Y bajo la perspectiva de un periodista: «[…] Twitter no es una amenaza a las tradiciones de nuestro oficio periodístico. Este añade, más que restar, a lo que hacemos».
Mark Luckie dice, que «Twitter es un ecosistema de noticias», el cual permite al periodista o al propio protagonista del evento que representa, expresar hechos u opiniones que abren espacio a un debate que se torna hacia contrastes partidarios u opuestos a fin de generar en el mundo informativo, una constante construcción del conocimiento y un proceso sustentable de recursos. Es así que se convierte en amparo del periodismo ciudadano, puesto que potencializa su oferta de información en las intervenciones que tiene el propio ciudadano en el proceso informativo y no depende de las estructuras rígidas que caracterizaban al periodismo tradicional.