Baro criticó el anuncio de la provincia: “no tiene en cuenta la inflación y distorsiona la realidad”
“El anuncio del aumento en las transferencias a los municipios (que son automáticas y corresponden por ley) del 41,4%, con relación a 2013, en concepto de coparticipación que realizó el Ministerio de Economía esconde un componente ineludible en nuestro país a la hora de analizar las variables económicas, como lo es el de la inflación. Si perdemos de vista esta situación nos da como resultado una realidad provincial completamente distorsionada”, cuestionó la senadora del Frente Renovador Malena Baro.
“Si la inflación no es tenida en cuenta solo estamos hablando de cifras vacías y completamente relativas. Es lógico entonces que con un nivel inflacionario, según las estimaciones más optimistas cercano al 35% anual, los números aumenten, pero esto nada tiene que ver con una mayor asignación de recursos que se transfieren en términos reales”, argumentó.
Asimismo, la legisladora por Junín dijo que “lo concreto es que los municipios son los que año a año van teniendo que afrontar con recursos propios las cada vez más marcadas falencias de la administración provincial”.
“Por ejemplo, dentro de los principales reclamos de los vecinos se encuentra el de mayor seguridad y en esta materia el gobierno bonaerense claramente ha dejado de invertir en infraestructura y logística y sólo se dedica a pagar sueldos”, agregó.
Por otra parte, Baro remarcó que “son los municipios los que con sus recursos sostienen por ejemplo el patrullaje, ya que si no existiera la tasa complementaria de seguridad en varios distritos, con lo que envía la provincia sólo se podría patrullar una semana, no se invertiría en un sistema de videovigilancia y no se asistiría a las comisarías, que muchas veces no cuentan con resmas de papel o impresoras para tomar una denuncia ante un hecho delictivo”.
“Lo mismo ocurre en materia educativa, con la inexistente inversión provincial en infraestructura, con obras demoradas o paralizadas en muchos casos en las escuelas, que son concluidas o proyectadas con el aporte municipal. Sumado a la crisis de los comedores escolares, con recorte de cupos incluido, y el transporte que son sostenidos en un gran número por las administraciones municipales que ante deudas provinciales con proveedores de más de ocho meses, intervienen y se hacen cargo para que miles de alumnos no se queden sin el servicio”, puntualizó.
“Párrafo aparte merece el estado calamitoso de los hospitales, la desinversión en insumos, y el rol que deben cumplir las unidades sanitarias municipales en los distritos, que deberían dedicarse a la atención primaria de la salud y hoy funcionan como un verdadero centro de contención de vecinos”, sostuvo la vicepresidente 2º del senado provincial.
“En este contexto, es evidente que la provincia no cumple desde hace muchos años con los servicios esenciales que reclama la ciudadanía y que ejecuta sus recursos de manera poco clara y eficiente”, arremetió Baro.
Finalmente, la legisladora massista manifestó que “solo puede explicarse un anuncio tan importante como significa un aumento en las transferencias a los municipios si lo enmarcamos en una gestión provincial que se dedica al márketing y a la foto para la prensa”.
“Si la inflación no es tenida en cuenta solo estamos hablando de cifras vacías y completamente relativas. Es lógico entonces que con un nivel inflacionario, según las estimaciones más optimistas cercano al 35% anual, los números aumenten, pero esto nada tiene que ver con una mayor asignación de recursos que se transfieren en términos reales”, argumentó.
Asimismo, la legisladora por Junín dijo que “lo concreto es que los municipios son los que año a año van teniendo que afrontar con recursos propios las cada vez más marcadas falencias de la administración provincial”.
“Por ejemplo, dentro de los principales reclamos de los vecinos se encuentra el de mayor seguridad y en esta materia el gobierno bonaerense claramente ha dejado de invertir en infraestructura y logística y sólo se dedica a pagar sueldos”, agregó.
Por otra parte, Baro remarcó que “son los municipios los que con sus recursos sostienen por ejemplo el patrullaje, ya que si no existiera la tasa complementaria de seguridad en varios distritos, con lo que envía la provincia sólo se podría patrullar una semana, no se invertiría en un sistema de videovigilancia y no se asistiría a las comisarías, que muchas veces no cuentan con resmas de papel o impresoras para tomar una denuncia ante un hecho delictivo”.
“Lo mismo ocurre en materia educativa, con la inexistente inversión provincial en infraestructura, con obras demoradas o paralizadas en muchos casos en las escuelas, que son concluidas o proyectadas con el aporte municipal. Sumado a la crisis de los comedores escolares, con recorte de cupos incluido, y el transporte que son sostenidos en un gran número por las administraciones municipales que ante deudas provinciales con proveedores de más de ocho meses, intervienen y se hacen cargo para que miles de alumnos no se queden sin el servicio”, puntualizó.
“Párrafo aparte merece el estado calamitoso de los hospitales, la desinversión en insumos, y el rol que deben cumplir las unidades sanitarias municipales en los distritos, que deberían dedicarse a la atención primaria de la salud y hoy funcionan como un verdadero centro de contención de vecinos”, sostuvo la vicepresidente 2º del senado provincial.
“En este contexto, es evidente que la provincia no cumple desde hace muchos años con los servicios esenciales que reclama la ciudadanía y que ejecuta sus recursos de manera poco clara y eficiente”, arremetió Baro.
Finalmente, la legisladora massista manifestó que “solo puede explicarse un anuncio tan importante como significa un aumento en las transferencias a los municipios si lo enmarcamos en una gestión provincial que se dedica al márketing y a la foto para la prensa”.