Este fin de semana arrancaron los corsos en la vecina ciudad. El Chaqueño Palavecino cerró la noche del domingo. Hubo numerosos juninenses entre el público.
El diario La Posta refleja sobre la jornada del domingo que "antes de las diez de la noche del domingo, las miradas estaban puestas en el cielo. Las estrellas brillaron en el firmamento nocturno como dando una señal. La lluvia y la noche incompleta del sábado ya eran historia. A las diez en punto el estruendo de la bomba inicial dijo “buenas noches: hoy habrá carnaval”. Y así fue que la fiesta comenzó con el carro que trasporta a la reina y sus princesas de la edición 2013. Ellas y sus encantadoras sonrisas marcaron el paso del desfile. Sobre las gradas, en los costados, desde las 22 hasta las 23 los lugares se fueron ocupando. Muy lentamente la gente se arrimó al corso".
Menciona el diario que concurrieron a Lincoln gente de Junín, Carmen de Areco, General Pinto, La Pampa, Chivilcoy, Ameghino, General Villegas, entre otros lugares.
Ya para las once de la noche el corso era una verdadera fiesta de música, arte, diversión y nieve, mucha nieve. Bajo el techo iluminado del corsódromo desfilaron los 140 motivos inscritos. También dejaron lo suyo los integrantes de “La Aldea”, de la batucada “Karaí”, de “Los titanes”, de “Unidos en Samba”, de “Escorpio” y de “Fénix”. El desfile de “Los Venecianos” volvió a generar lo de siempre: ternura, admiración y aplausos. Y con esos sentimientos se fue perdiendo la noche.
“La Mecánica Loca” y los “Autos Locos” serían los encargados de cerrar una noche distinta, el segundo capítulo del Carnaval 2014.
El sábado, primera noche, el cuarteto linqueño Tengo Pa’ l Truco preparó un concierto con sorpresas que se fueron desnudando de a poco, suavemente. Con Carlos Passeggi en la batería, Luis Hopúa en teclados, Gonzalo Villalba en guitarra y bandoneón y Damián Balarino en piano, Tengo Pa’ l Truco fue presentando a sus invitados a medida que avanzó el concierto. Formaron parte los alumnos del Conservatorio “Aldo Quadraccia”; el Coro municipal de Niños y Orquesta Escuela que dirige la profesora Virginia Abadía; el Ensamble Vocal del Conservatorio “Quadraccia”, dirigido por Gerardo Marchessi; y el Ballet Malambo Argentino, encabezado por Gastón Courreges (Piedritas).
También tuvieron su momento la chicas de la Escuela de Danzas de la profesora Mariela Guerra; las acróbatas en telas de Trepo al Trapo; el baterista Maximiliano Aldabe; la artista plástica Zaida Rafful, quien pintó en vivo a su modelo, “Faty” Quiroz; el guitarrista “Cacho” Cler (Arenaza); Diego Sandullo (La Plata); y Matías Marcipar (Santa Fe). Uno de los primeros en ganarse la ovación fue el cantante Germán Álvarez, que homenajeó a Héctor Serazzi. También formaron parte del show el bajista Martín Beloso, Enzo Adami, Carlos Alonso, el reconocido trompetista Edgardo Pareta, “Poli” Gomitolo, Diego Videla, Concepción Rillo, Mercedes Miravalle, Teresa Gómez, Jorge “peludo” Andurell y “El Indio” Cabral.
Las canciones populares, como las zambas, las chacareras y los carnavalitos, fueron marcando las emociones de una presentación que será inolvidable. Sobre todo, para aquellos artistas que por primera vez en sus vidas cantaron y actuaron arriba del imponente escenario del corso. Por primera vez, ellos fueron los protagonistas, los encargados de abrir el telón de nuestra máxima fiesta.
En el cierre del acto inaugural, los participantes decidieron entonar el Himno Nacional Argentino. Ése fue el final y el principio de una catarata de fuegos artificiales que se dispararon desde los techos del Palacio Municipal. El cielo se iluminó y los rostros se llenaron de magia.
Después de que los artistas locales y los fuegos artificiales explotaran, desde la avenida Massey, esquina Caseros, comenzaron a desfilar los motivos. Pero, lentamente, la tormenta -que amenazó durante toda la noche- azotó a la ciudad y obligó a suspender el desfile.
(Fuente: La Posta del Noroeste)
El diario La Posta refleja sobre la jornada del domingo que "antes de las diez de la noche del domingo, las miradas estaban puestas en el cielo. Las estrellas brillaron en el firmamento nocturno como dando una señal. La lluvia y la noche incompleta del sábado ya eran historia. A las diez en punto el estruendo de la bomba inicial dijo “buenas noches: hoy habrá carnaval”. Y así fue que la fiesta comenzó con el carro que trasporta a la reina y sus princesas de la edición 2013. Ellas y sus encantadoras sonrisas marcaron el paso del desfile. Sobre las gradas, en los costados, desde las 22 hasta las 23 los lugares se fueron ocupando. Muy lentamente la gente se arrimó al corso".
Menciona el diario que concurrieron a Lincoln gente de Junín, Carmen de Areco, General Pinto, La Pampa, Chivilcoy, Ameghino, General Villegas, entre otros lugares.
Ya para las once de la noche el corso era una verdadera fiesta de música, arte, diversión y nieve, mucha nieve. Bajo el techo iluminado del corsódromo desfilaron los 140 motivos inscritos. También dejaron lo suyo los integrantes de “La Aldea”, de la batucada “Karaí”, de “Los titanes”, de “Unidos en Samba”, de “Escorpio” y de “Fénix”. El desfile de “Los Venecianos” volvió a generar lo de siempre: ternura, admiración y aplausos. Y con esos sentimientos se fue perdiendo la noche.
“La Mecánica Loca” y los “Autos Locos” serían los encargados de cerrar una noche distinta, el segundo capítulo del Carnaval 2014.
El sábado, primera noche, el cuarteto linqueño Tengo Pa’ l Truco preparó un concierto con sorpresas que se fueron desnudando de a poco, suavemente. Con Carlos Passeggi en la batería, Luis Hopúa en teclados, Gonzalo Villalba en guitarra y bandoneón y Damián Balarino en piano, Tengo Pa’ l Truco fue presentando a sus invitados a medida que avanzó el concierto. Formaron parte los alumnos del Conservatorio “Aldo Quadraccia”; el Coro municipal de Niños y Orquesta Escuela que dirige la profesora Virginia Abadía; el Ensamble Vocal del Conservatorio “Quadraccia”, dirigido por Gerardo Marchessi; y el Ballet Malambo Argentino, encabezado por Gastón Courreges (Piedritas).
También tuvieron su momento la chicas de la Escuela de Danzas de la profesora Mariela Guerra; las acróbatas en telas de Trepo al Trapo; el baterista Maximiliano Aldabe; la artista plástica Zaida Rafful, quien pintó en vivo a su modelo, “Faty” Quiroz; el guitarrista “Cacho” Cler (Arenaza); Diego Sandullo (La Plata); y Matías Marcipar (Santa Fe). Uno de los primeros en ganarse la ovación fue el cantante Germán Álvarez, que homenajeó a Héctor Serazzi. También formaron parte del show el bajista Martín Beloso, Enzo Adami, Carlos Alonso, el reconocido trompetista Edgardo Pareta, “Poli” Gomitolo, Diego Videla, Concepción Rillo, Mercedes Miravalle, Teresa Gómez, Jorge “peludo” Andurell y “El Indio” Cabral.
Las canciones populares, como las zambas, las chacareras y los carnavalitos, fueron marcando las emociones de una presentación que será inolvidable. Sobre todo, para aquellos artistas que por primera vez en sus vidas cantaron y actuaron arriba del imponente escenario del corso. Por primera vez, ellos fueron los protagonistas, los encargados de abrir el telón de nuestra máxima fiesta.
En el cierre del acto inaugural, los participantes decidieron entonar el Himno Nacional Argentino. Ése fue el final y el principio de una catarata de fuegos artificiales que se dispararon desde los techos del Palacio Municipal. El cielo se iluminó y los rostros se llenaron de magia.
Después de que los artistas locales y los fuegos artificiales explotaran, desde la avenida Massey, esquina Caseros, comenzaron a desfilar los motivos. Pero, lentamente, la tormenta -que amenazó durante toda la noche- azotó a la ciudad y obligó a suspender el desfile.
(Fuente: La Posta del Noroeste)