Se trata de Roberto Zapata quien atacó a tiros un vehículo en el que viajaba una mujer, un hombre y una nena de 10 años que resultó con heridas en su cabeza por la rotura de vidrios.
La localidad de General Pinto se vio conmocionada en las últimas horas por el ataque a tiros contra un vehículo en el que viajaban tres personas, entre ellas una menor de 10 años.
Todo ocurrió en la madrugada del jueves último, alrededor de la 1.30, cuando una mujer de unos 25 años, identificada como Carla Fredes, transitaba por la ciudad junto a su pequeña hija de 10 años y acompañada por un hombre que sería de Florentino Ameghino, a bordo de un Renault Stylo.
El vehículo se desplazaba por avenida San Martín, cuando al llegar a la intersección con la calle Arístides Blanco fueron sorprendidos por un Toyota modelo Avensis del que le dispararon con un arma de fuego en al menos tres oportunidades, impactando los proyectiles en el guardabarro delantero, el parante trasero y uno de los vidrios.
Tras el ataque, el sujeto identificado posteriormente como Roberto Zapata –que habría estado solo en el momento del hecho- se escapó pero apenas se tomó conocimiento del episodio, se lo comenzó a buscar intensamente a través de un operativo rastrillaje por el distrito de General Pinto y que incluyó a toda la región.
En tanto, a raíz de los disparos, la menor que iba en el automóvil junto a su madre, sufrió una herida cortante aparentemente en el cuero cabelludo, por lo que debió ser asistida en el Hospital Municipal y posteriormente fue dada de alta.
Las causas
El hecho conmocionó a la ciudad que vio su habitual calma alterada por la noticia, la que tuvo desde el primer momento distintas versiones. El móvil, que trascendió a pesar del fuerte hermetismo policial y judicial, podría estar ligado a la relación sentimental entre el comerciante y la mujer, la que luego de unos años, habría llegado a su fin, hace poco tiempo.
La aprehensión de Zapata
El operativo rastrillaje que incluyó toda la región dio resultado positivo en la mañana del mismo jueves ya que Zapata –conocido comerciante pintense dedicado al rubro electrodomésticos- fue individualizado en la ciudad de Rufino adonde se trasladaron efectivos de la Policía del distrito de General Pinto para proceder a su aprehensión.
El viaje a Rufino lo había emprendido luego de realizado el ataque contra el auto de Fredes. Las tareas investigativas y las distintas diligencias permitieron también secuestrar un revólver calibre 38 con el que se habrían efectuado los disparos, el que fue entregado voluntariamente por el hermano de Zapata, para las pericias de balísticas con el fin de establecer que efectivamente fue el utilizado por el atacante, teniendo en cuenta que uno de los proyectiles habría quedado dentro del vehículo.
El jueves Zapata fue trasladado a la ciudad de Junín donde se le realizó un dermotest, prueba para constatar la presencia de pólvora en su mano. Posteriormente volvió a la comisaría de General Pinto, para cumplir con los trámites de rutina y desde allí fue trasladado a la sede policial de Florentino Ameghino.
Este viernes por la mañana nuevamente fue conducido a la ciudad de Junín para prestar declaración indagatoria y posteriormente se determinará su futura situación procesal ya que actualmente se encuentra en calidad de aprehendido imputado de “Homicidio en grado de tentativa”.
La localidad de General Pinto se vio conmocionada en las últimas horas por el ataque a tiros contra un vehículo en el que viajaban tres personas, entre ellas una menor de 10 años.
Todo ocurrió en la madrugada del jueves último, alrededor de la 1.30, cuando una mujer de unos 25 años, identificada como Carla Fredes, transitaba por la ciudad junto a su pequeña hija de 10 años y acompañada por un hombre que sería de Florentino Ameghino, a bordo de un Renault Stylo.
El vehículo se desplazaba por avenida San Martín, cuando al llegar a la intersección con la calle Arístides Blanco fueron sorprendidos por un Toyota modelo Avensis del que le dispararon con un arma de fuego en al menos tres oportunidades, impactando los proyectiles en el guardabarro delantero, el parante trasero y uno de los vidrios.
Tras el ataque, el sujeto identificado posteriormente como Roberto Zapata –que habría estado solo en el momento del hecho- se escapó pero apenas se tomó conocimiento del episodio, se lo comenzó a buscar intensamente a través de un operativo rastrillaje por el distrito de General Pinto y que incluyó a toda la región.
En tanto, a raíz de los disparos, la menor que iba en el automóvil junto a su madre, sufrió una herida cortante aparentemente en el cuero cabelludo, por lo que debió ser asistida en el Hospital Municipal y posteriormente fue dada de alta.
Las causas
La aprehensión de Zapata
El operativo rastrillaje que incluyó toda la región dio resultado positivo en la mañana del mismo jueves ya que Zapata –conocido comerciante pintense dedicado al rubro electrodomésticos- fue individualizado en la ciudad de Rufino adonde se trasladaron efectivos de la Policía del distrito de General Pinto para proceder a su aprehensión.
El viaje a Rufino lo había emprendido luego de realizado el ataque contra el auto de Fredes. Las tareas investigativas y las distintas diligencias permitieron también secuestrar un revólver calibre 38 con el que se habrían efectuado los disparos, el que fue entregado voluntariamente por el hermano de Zapata, para las pericias de balísticas con el fin de establecer que efectivamente fue el utilizado por el atacante, teniendo en cuenta que uno de los proyectiles habría quedado dentro del vehículo.
El jueves Zapata fue trasladado a la ciudad de Junín donde se le realizó un dermotest, prueba para constatar la presencia de pólvora en su mano. Posteriormente volvió a la comisaría de General Pinto, para cumplir con los trámites de rutina y desde allí fue trasladado a la sede policial de Florentino Ameghino.
Este viernes por la mañana nuevamente fue conducido a la ciudad de Junín para prestar declaración indagatoria y posteriormente se determinará su futura situación procesal ya que actualmente se encuentra en calidad de aprehendido imputado de “Homicidio en grado de tentativa”.