También se buscará renovar el vestuario para combatir incendios.
La intención de dotar de mayor capacidad de elementos y equipos, siempre con la premisa de la pronta respuesta que caracteriza al cuartel de bomberos de nuestra ciudad, es el objetivo con que la cooperadora de apoyo a dicha institución ha encarado 2014.
Eduardo Naya, actualmente tesorero de la Cooperadora de Bomberos, dijo a LA VERDAD que “gracias a Dios se ha progresado muchísimo. Venimos todavía con un atraso en lo que respecta al equipamiento móvil, en cuanto a antigüedad de los mismos pero la flota tiene muchos más móviles que en relación a años atrás”.
“Hoy nos adelantamos en cuanto al mantenimiento. Antes que pase algo en una unidad, ya estamos arreglando” destacó Naya quien también puso de relieve que “de a poco estamos avanzando en la renovación de la flota”.
En los próximos días comenzará una nueva campaña de socios protectores para dotar al cuartel de una unidad nueva y propia. Actualmente el cuartel tiene cuatro autobombas con capacidad de más de 1.500 litros, tres camionetas para incendios forestales –dos en funcionamiento y una de ellas de reserva-, un móvil liviano para rescate, otro –similar a una casilla rodante- equipado con cuatro camas, televisor, heladera y grupo electrógeno para permitir que el personal pueda alojarse en caso de tener que movilizarse a brindar apoyo a otras localidades.
Naya –quien fue jefe del cuartel de Bomberos de nuestra ciudad durante varios años- dijo que las autobombas están todas en perfecto funcionamiento y consideró que la cantidad de unidades del cuartel son más que suficientes para una ciudad como Junín.
También está proyectado la posibilidad de ir renovando el equipo personal –conformado por un chaquetón, pantalones y botas- para los efectivos mencionando al respecto que el costo de cada uno está en 10 mil a 12 mil pesos.
“Lo ideal es que cada efectivo tenga su equipo, pero ante los costos, por lo menos buscar contar con la cantidad necesaria para quienes están de guardia”, indicó. “Por lo menos la intención es comprar tres o cuatro equipos por año. Lo importante es que, por más uso que tenga, está garantizado una duración de al menos diez años”, contó.
Eduardo Naya, tesorero de la Cooperadora de Bomberos Junín |
Eduardo Naya, actualmente tesorero de la Cooperadora de Bomberos, dijo a LA VERDAD que “gracias a Dios se ha progresado muchísimo. Venimos todavía con un atraso en lo que respecta al equipamiento móvil, en cuanto a antigüedad de los mismos pero la flota tiene muchos más móviles que en relación a años atrás”.
“Hoy nos adelantamos en cuanto al mantenimiento. Antes que pase algo en una unidad, ya estamos arreglando” destacó Naya quien también puso de relieve que “de a poco estamos avanzando en la renovación de la flota”.
En los próximos días comenzará una nueva campaña de socios protectores para dotar al cuartel de una unidad nueva y propia. Actualmente el cuartel tiene cuatro autobombas con capacidad de más de 1.500 litros, tres camionetas para incendios forestales –dos en funcionamiento y una de ellas de reserva-, un móvil liviano para rescate, otro –similar a una casilla rodante- equipado con cuatro camas, televisor, heladera y grupo electrógeno para permitir que el personal pueda alojarse en caso de tener que movilizarse a brindar apoyo a otras localidades.
Naya –quien fue jefe del cuartel de Bomberos de nuestra ciudad durante varios años- dijo que las autobombas están todas en perfecto funcionamiento y consideró que la cantidad de unidades del cuartel son más que suficientes para una ciudad como Junín.
También está proyectado la posibilidad de ir renovando el equipo personal –conformado por un chaquetón, pantalones y botas- para los efectivos mencionando al respecto que el costo de cada uno está en 10 mil a 12 mil pesos.
“Lo ideal es que cada efectivo tenga su equipo, pero ante los costos, por lo menos buscar contar con la cantidad necesaria para quienes están de guardia”, indicó. “Por lo menos la intención es comprar tres o cuatro equipos por año. Lo importante es que, por más uso que tenga, está garantizado una duración de al menos diez años”, contó.