Así lo dijo el presidente del Centro que los agrupa
en nuestra ciudad durante el acto realizado en la plaza de las Fuerzas Armadas
al cumplirse 32 años del enfrentamiento con Gran Bretaña por las islas del
Atlántico Sur. El recuerdo permanente de Alfredo Jurio, Miguel Angel Soriano,
Daniel Seitún y Ricardo Gurrieri, juninenses caídos en suelo malvinense.
Con emoción y profundo sentimiento de recuerdo permanente a
los soldados caídos en Malvinas, como también en homenaje a los veteranos de
Guerra, se realizó ayer en nuestra ciudad el acto central en conmemoración de
los 32 años del conflicto bélico del Atlántico Sur.
La ceremonia se cumplió en la plaza de las Fuerzas Armadas
en avenida San Martín y Rivadavia, contándose con la presencia de los miembros
del Centro de Veteranos de Guerra “Islas Malvinas” de Junín, el secretario
general del Gobierno Local, Javier Gabrielli, concejales, funcionarios municipales,
autoridades civiles, consejeros escolares, UNNOBA, militares, de fuerzas de seguridad,
representantes de instituciones intermedias y público.
Luego de la entonación de las estrofas del Himno Nacional
Argentino, distintos organismos de gobierno, Concejo Deliberante, Centro de
Veteranos e instituciones, depositaron ofrendas florales recordando a los caídos
de Malvinas. Inmediatamente después se realizó un toque de silencio.
Luján: “Hacemos memoria”
El único orador del acto fue el presidente del Centro de
Veteranos de Guerra Islas Malvinas en Junín, Carlos Luján quien dijo que “hoy
nos reunimos aquí para conmemorar el Día del Veterano de Guerra pero principalmente
pero principalmente para recordar a los caídos en Malvinas. Ellos son los
verdaderos protagonistas y héroes de esta fecha”.
“El 2 de abril se convirtió en el día que nuestro país vivió
el peor de los flagelos como es la guerra. Nosotros, con tan solo 18-19 años,
nos encontró el horror de la guerra en esas tierras tan nuestras y tan lejanas
para defender lo que nos corresponde, para defender lo que nos pertenece”,
agregó.
Sostuvo Luján que “en esa época nuestras risas fueron
mutando. Los rostros adolescentes iban perdiendo el brillo de la inocencia y
las arrugas del alma empezaban a marcarse. Fueron 74 días de crueles y
violentos combates en todas las posiciones, donde hubo muchas bajas de ambos
bandos. Ya han pasado 32 años del acontecimiento más relevante de nuestra
historia contemporánea”.
“Reivindicar la Guerra de Malvinas –sostuvo- es solamente
para recordar y homenajear a los que regaron con su sangre la turba
malvinenses. Por los que quedaron, por los que volvieron y no lo soportaron,
por quienes siguen en la difícil lucha tratando de borrar las huellas que deja
la guerra, por nosotros los veteranos por nuestras familias, por nuestra Patria
y nuestra soberanía. Los veteranos de guerra seguimos de pie. Estamos grande
pero mientras respiremos seguiremos siendo testigos vivientes de esta historia”.
Destacó que “hacemos memoria para que nadie se olvide de los
649 hombres que quedaron en Malvinas. Ellos son los verdaderos héroes y Junín,
nuestra ciudad, tiene héroes con nombre y apellido: Alfredo Jurio, Miguel Angel
Soriano, Daniel Seitún y Ricardo Gurrieri. No reneguemos de nuestro pasado,
aprendamos de él y valoremos debidamente la entrega y sacrificio de nuestros héroes.
Como dijo Nicolás Avellaneda, los pueblos que se apoyan sobre sus tumbas
gloriosas, son los que mejor preparan el porvenir”.
“Por eso nunca hay que olvidarse de los héroes y sus
familias. Nosotros siempre los vamos a recordar. Nuestro Señor nos dio la luz y
la fuerza para volver y para ser hoy testimonio de vida. Gracias él nosotros
hemos regresado de Malvinas y estamos para mantener viva la llama de esta
gesta. Hemos vuelto y aquí estamos, pero nadie vuelve de una Guerra, si lo
hace, de la misma manera que fue Muere el que muere y un poco muere el que
vuelve también”, concluyó Luján quien también recordó a otro ex combatiente
fallecido hace dos años y que perteneció al Centro de Veteranos: Ernesto Wagner.
Emotiva carta
A renglón seguido, Luján dio lectura a una emotiva carta
escrita por el ex combatiente Daniel Casco –quien estaba presente junto a sus
padres y su hija- escrita en Malvinas el 25 de mayo de 1982, dirigida a Olga
Esther Cuello –su mamá-, su padre – Hugo Osvaldo Casco- y su hija Daniela
Casco.
En algunos párrafos de esta carta, donde el veterano de
guerra cuenta a sus padres su vida en Malvinas aquellos días, Daniel Casco
señalaba hace poco más de tres décadas: “Como sabrán las cosas acá, no están
muy bien que digamos pero a pesar de todo, yo estoy muy bien. Mami, lo único
que te pido es que te quedes tranquila porque esto ya va a pasar. Ya va a
volver a reinar la paz en nuestra Argentina”... “Papi, dale duro a las
bicicletas que vos con tus herramientas y yo con el fusil estamos luchando por
una misma causa”... “Denle duro a los laburos, el Walter, la mami, que yo le
voy a dar duro a los guachos con mi fusil. Espero volver pronto así la vieja nos
hace los ñoquis como me gustan a mí y a mi Daniela, porque la última vez que la
Yoli hizo ñoquis, la “loqui” comió más que nosotros dos”.
Tras la lectura de la carta, la Banda del Grupo de Artillería
10, cerró el acto con la ejecución de la marcha de Malvinas.