El ex asaltante de bancos y blindados recibió ayer la libertad asistida. Fuera de la cárcel, sostuvo que "la droga está arruinando a los pibes" y aseguró que no volverá a delinquir porque desea "vivir bien"
El ex asaltante de bancos y blindados recibió ayer la libertad asistida. Fuera de la cárcel, sostuvo que "la droga está arruinando a los pibes" y aseguró que no volverá a delinquir porque desea "vivir bien".
El célebre delincuente Luis "Gordo" Valor, recién excarcelado con el beneficio de la libertad asistida, prometió que no va "a delinquir más", aseguró que ahora desea "vivir bien" y "disfrutar" de su esposa pero nunca más "volver a la cárcel".
En una entrevista publicada por la revista Crimen y Razón, el ex asaltante de bancos y camiones blindados, que recibió tres condenas a 24, 20 y 7 años en distintas sentencias, analizó la inseguridad actual y opinó que "el delito cambió" y que "ahora hay que cuidarse de los narcos y de los que te matan para robarte dos mangos".
"A mí me hicieron mala fama, pero nunca lastimé a nadie", se quejó Valor, pese a que durante un asalto a un blindado en el que participó hubo un tiroteo y cayeron muertos un policía y dos cómplices suyos, por lo que recibió la condena a dos décadas de encierro.
Según el experimentado asaltante, "la droga está arruinando a los pibes. Hoy te arruinan por dos mangos. En la cárcel, un par de zapatillas puede ser una cuestión de vida o muerte".
En los años 90, Valor lideró la llamada "superbanda" de asaltos a camiones de caudales, junto a Luis "Garza" Sosa, y luego del primer juicio oral purgó una condena entre 1995 y 2007. Entonces protagonizó una fuga de la cárcel de Villa Devoto y en 2009 cayó arrestado de nuevo cuando conducía un auto -con armas y efectos robados- por el interior del country Olivos Golf Club, adonde había ingresado haciéndose pasar por un inspector de la justicia.
En los últimos años estuvo encerrado en la cárcel de Campana, donde solía organizar festejos en las visitas del Día de la Madre y el Día del Niño. Ayer el juez de Ejecución Penal de San Isidro, Alejandro Davis, hizo lugar al pedido de la defensa y lo benefició con la libertad asistida.
En algunos de los años que permaneció en la cárcel también pasó por la unidad penitenciaria 13 de Junín.