Son causa de cirrosis, cáncer hepático y trasplantes de hígado. Convocan a vacunarse y realizarse un test de sangre para detectarlas antes de que sea demasiado tarde.
Se calcula que en el país unas 400 mil personas tienen hepatitis B o C. Sin embargo solo el 5 por ciento lo sabe. El resto, si no hace nada, se enterará recién cuando tenga cirrosis, cáncer hepático o cuando su hígado esté tan dañado que requiera un trasplante.
“Las hepatitis B o C son silenciosas, recién se expresan a través de sus complicaciones”, advirtió el ministro de Salud de la provincia, Alejandro Collia durante el lanzamiento de la campaña de detección temprana de estas enfermedades. La presentación se hizo esta mañana en la Casa de la Provincia de Buenos Aires.
“Pocos lo saben pero virus como el de la hepatitis C está cinco veces más diseminado que el VIH, es decir que por cada caso de VIH habrá cinco de hepatitis”, detalló Collia y agregó que ambos tipos de hepatitis se contraen por relaciones sexuales sin preservativo o por contacto con sangre de una persona infectada. En muchos casos, observan los especialistas, la vía de contagio es el “canuto” o tubito que comparten los usuarios de cocaína.
“Hacete la prueba al menos una vez en la vida”, es el lema de la campaña que pusieron en marcha hoy el ministerio de Salud de la Provincia, la Fundación Icalma y el servicio de Hepatología del hospital Italiano de Buenos Aires ¿Qué pretende? Que la gente pida a su médico -ya sea del subsector privado de la salud o de un hospital público-, que le realice el test para saber si tiene o no hepatitis.
“Es un análisis de sangre muy simple pero fundamental para evitar el avance silencioso de esta enfermedad que inflama el hígado y la llena de cicatrices hasta dejarlo completamente disfuncional”, explicó el Presidente de Icalma, Adrián Gadano.
Dar con el diagnóstico tempranamente cambia el futuro. “Hoy contamos con tratamientos muy efectivos y en los próximos años contaremos con tratamientos a medida, que evitarán años de sufrimiento y de patologías muy difíciles de tratar, como la cirrosis o el cáncer hepático”, agregó el especialista.
SE PUEDE PREVENIR
La hepatitis B es cien por ciento prevenible. Y hacerlo no cuesta nada. Es que existe una vacuna en el calendario nacional disponible tanto para chicos como para adultos, que evita contraer ese virus.
La hepatitis C, en cambio, aún no cuenta con inmunización. En ambos casos, para evitar estos virus, se recomienda mantener relaciones sexuales con preservativo, no compartir jeringas, canutos ni elementos que pudieran estar en contacto con sangre y evitar tatuajes, piercings o acupuntura a fin de disminuir el riesgo de contagio.
Según datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS), entre 130 y 170 millones de personas en el mundo están infectadas con el virus de la hepatitis C y más de 350.000 mueren cada año como consecuencia de enfermedades hepáticas relacionadas con esta enfermedad.
“Diagnosticar las hepatitis antes de las complicaciones es el mayor desafío, porque la mayoría de los afectados no saben que portan esos virus que constituyen la principal causa de trasplante de hígado”, concluyó Gadano.
Del lanzamiento de la campaña participaron el viceministro de Salud, Sergio Alejandre, el director provincial de Hospitales, Claudio Ortiz, el director provincial de Atención Primaria, Luis Crovetto, la coordinadora del programa de VIH y Hepatitis Virales, Sonia Quiruelas, su par de Nación, Carlos Falistocco y el subsecretario de la Casa de la Provincia, Rodolfo Valenta.
Se calcula que en el país unas 400 mil personas tienen hepatitis B o C. Sin embargo solo el 5 por ciento lo sabe. El resto, si no hace nada, se enterará recién cuando tenga cirrosis, cáncer hepático o cuando su hígado esté tan dañado que requiera un trasplante.
“Las hepatitis B o C son silenciosas, recién se expresan a través de sus complicaciones”, advirtió el ministro de Salud de la provincia, Alejandro Collia durante el lanzamiento de la campaña de detección temprana de estas enfermedades. La presentación se hizo esta mañana en la Casa de la Provincia de Buenos Aires.
“Pocos lo saben pero virus como el de la hepatitis C está cinco veces más diseminado que el VIH, es decir que por cada caso de VIH habrá cinco de hepatitis”, detalló Collia y agregó que ambos tipos de hepatitis se contraen por relaciones sexuales sin preservativo o por contacto con sangre de una persona infectada. En muchos casos, observan los especialistas, la vía de contagio es el “canuto” o tubito que comparten los usuarios de cocaína.
“Hacete la prueba al menos una vez en la vida”, es el lema de la campaña que pusieron en marcha hoy el ministerio de Salud de la Provincia, la Fundación Icalma y el servicio de Hepatología del hospital Italiano de Buenos Aires ¿Qué pretende? Que la gente pida a su médico -ya sea del subsector privado de la salud o de un hospital público-, que le realice el test para saber si tiene o no hepatitis.
“Es un análisis de sangre muy simple pero fundamental para evitar el avance silencioso de esta enfermedad que inflama el hígado y la llena de cicatrices hasta dejarlo completamente disfuncional”, explicó el Presidente de Icalma, Adrián Gadano.
Dar con el diagnóstico tempranamente cambia el futuro. “Hoy contamos con tratamientos muy efectivos y en los próximos años contaremos con tratamientos a medida, que evitarán años de sufrimiento y de patologías muy difíciles de tratar, como la cirrosis o el cáncer hepático”, agregó el especialista.
SE PUEDE PREVENIR
La hepatitis B es cien por ciento prevenible. Y hacerlo no cuesta nada. Es que existe una vacuna en el calendario nacional disponible tanto para chicos como para adultos, que evita contraer ese virus.
La hepatitis C, en cambio, aún no cuenta con inmunización. En ambos casos, para evitar estos virus, se recomienda mantener relaciones sexuales con preservativo, no compartir jeringas, canutos ni elementos que pudieran estar en contacto con sangre y evitar tatuajes, piercings o acupuntura a fin de disminuir el riesgo de contagio.
Según datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS), entre 130 y 170 millones de personas en el mundo están infectadas con el virus de la hepatitis C y más de 350.000 mueren cada año como consecuencia de enfermedades hepáticas relacionadas con esta enfermedad.
“Diagnosticar las hepatitis antes de las complicaciones es el mayor desafío, porque la mayoría de los afectados no saben que portan esos virus que constituyen la principal causa de trasplante de hígado”, concluyó Gadano.
Del lanzamiento de la campaña participaron el viceministro de Salud, Sergio Alejandre, el director provincial de Hospitales, Claudio Ortiz, el director provincial de Atención Primaria, Luis Crovetto, la coordinadora del programa de VIH y Hepatitis Virales, Sonia Quiruelas, su par de Nación, Carlos Falistocco y el subsecretario de la Casa de la Provincia, Rodolfo Valenta.