Sebastián Cancio, diez veces campéon nacional, murió 14 días después de ser internado tras correr la Doble Bragado
El domingo 22 de febrero de 2015 será recordado como un día triste para el ciclismo argentino. El juninense Sebastián Cancio, diez veces campeón argentino de pista, falleció tras sufrir un ataque al corazón; fue el peor desenlace tras una angustiosa incertidumbre que comenzó cuando el 8 de febrero pasado fue internado en el Hospital Ramos Mejía con un cuadro de deshidratación e insolación al terminar tercero en la Doble Bragado.
Cancio, campeón panamericano en 2004 y ganador en 2005 de la primera fecha de la carrera por puntos del Campeonato del Mundo en Moscú de ciclismo en pista, sufría un problema hepático que le afectó los riñones. "Sebastián venía incubando una hepatitis previa a la carrera a la que hizo caso omiso, y esta patología provocó la recaída que se incrementó por el cuadro de deshidratación", había explicado días atrás Gerardo Crisafulli, entrenador de su equipo (SAT), al diario Bragado Informa.
Desde la Asociación Metropolitana de Ciclismo, encargada de fiscalizar la Doble Bragado, informaron a la nacion que los ciclistas deben presentar un apto físico firmado por un médico en una ficha adosada para poder sacar la licencia anual que entrega la Federación Argentina de Ciclismo de Pista y Ruta. Esta licencia les permite competir durante todo el año y es válida hasta el 31 de diciembre. A partir de allí, los controles médicos corresponden a cada ciclista personalmente.
"La Federación nos exige un apto físico con todos los estudios pertinentes para poder correr. Después hay circunstancias en las que uno deja más de lo que tiene y se exige al límite para lograr objetivos. Uno tiene mayor o menor capacidad de sufrimiento o tolerancia al dolor, y Sebastián tenía mucha, era un gladiador. Es una tristeza enorme porque se fue un grande", dijo Martín Ferrari, que corrió en la Doble Bragado para los Cascos Naranjas, el equipo Buenos Aires Provincia.
"Es un tema muy difícil y más con todo lo que pasó. En nuestro equipo nos exigen controles cada dos o tres meses, pero no sé si pasa en todos. Sin ser hipócrita, si no fuera por la obligación, no sé si somos tan conscientes como para hacerlos. Y en general, no sólo en el ciclismo sino también en otros deportes. Nos gusta tanto que en ocasiones nos sometemos a esfuerzos extremos y a veces uno no mide los límites", explicó Ferrari, que también es técnico de la selección de ciclismo adaptado.
Cancio será despedido hoy en Junín, a las 12, con un cortejo que irá desde la sala San Felipe (ubicada en Carlos Tejedor 450 y Av. Circunvalación) hasta la sala crematoria, según informó ayer su esposa María Ángeles en su cuenta de Facebook. "Cuando salió campeón del mundo, llegó prácticamente solo a su Junín. Así que si desean brindarle ese último gran aplauso, creo que le habría gustado oír esa hinchada. Vamos Junín, démosle ese aplauso así se eleva contento y triunfante mi negro", escribió..
El domingo 22 de febrero de 2015 será recordado como un día triste para el ciclismo argentino. El juninense Sebastián Cancio, diez veces campeón argentino de pista, falleció tras sufrir un ataque al corazón; fue el peor desenlace tras una angustiosa incertidumbre que comenzó cuando el 8 de febrero pasado fue internado en el Hospital Ramos Mejía con un cuadro de deshidratación e insolación al terminar tercero en la Doble Bragado.
Cancio, campeón panamericano en 2004 y ganador en 2005 de la primera fecha de la carrera por puntos del Campeonato del Mundo en Moscú de ciclismo en pista, sufría un problema hepático que le afectó los riñones. "Sebastián venía incubando una hepatitis previa a la carrera a la que hizo caso omiso, y esta patología provocó la recaída que se incrementó por el cuadro de deshidratación", había explicado días atrás Gerardo Crisafulli, entrenador de su equipo (SAT), al diario Bragado Informa.
Desde la Asociación Metropolitana de Ciclismo, encargada de fiscalizar la Doble Bragado, informaron a la nacion que los ciclistas deben presentar un apto físico firmado por un médico en una ficha adosada para poder sacar la licencia anual que entrega la Federación Argentina de Ciclismo de Pista y Ruta. Esta licencia les permite competir durante todo el año y es válida hasta el 31 de diciembre. A partir de allí, los controles médicos corresponden a cada ciclista personalmente.
"La Federación nos exige un apto físico con todos los estudios pertinentes para poder correr. Después hay circunstancias en las que uno deja más de lo que tiene y se exige al límite para lograr objetivos. Uno tiene mayor o menor capacidad de sufrimiento o tolerancia al dolor, y Sebastián tenía mucha, era un gladiador. Es una tristeza enorme porque se fue un grande", dijo Martín Ferrari, que corrió en la Doble Bragado para los Cascos Naranjas, el equipo Buenos Aires Provincia.
"Es un tema muy difícil y más con todo lo que pasó. En nuestro equipo nos exigen controles cada dos o tres meses, pero no sé si pasa en todos. Sin ser hipócrita, si no fuera por la obligación, no sé si somos tan conscientes como para hacerlos. Y en general, no sólo en el ciclismo sino también en otros deportes. Nos gusta tanto que en ocasiones nos sometemos a esfuerzos extremos y a veces uno no mide los límites", explicó Ferrari, que también es técnico de la selección de ciclismo adaptado.
Cancio será despedido hoy en Junín, a las 12, con un cortejo que irá desde la sala San Felipe (ubicada en Carlos Tejedor 450 y Av. Circunvalación) hasta la sala crematoria, según informó ayer su esposa María Ángeles en su cuenta de Facebook. "Cuando salió campeón del mundo, llegó prácticamente solo a su Junín. Así que si desean brindarle ese último gran aplauso, creo que le habría gustado oír esa hinchada. Vamos Junín, démosle ese aplauso así se eleva contento y triunfante mi negro", escribió..