Según una asociación protectora, uno de ellos fue hallado con signos evidentes de maltrato y otro estaba atado con cables. Acusan a dueños de animales sometidos a competir en carreras
Asociaciones protectoras de animales denunciaron hoy una matanza de perros de raza galgo en la ciudad bonaerense de Junín, donde uno de ellos fue hallado con signos evidentes de maltrato y otro estaba atado con cables, y acusaron a dueños de animales sometidos a competir en carreras.
Las organizaciones, que reclamaron leyes de protección, advirtieron que "los dueños de perros galgos descartan a los que ya no sirven para correr y los tiran".
La organización Proyecto Galgo Argentino informó a DyN que uno de los animales apareció en una zanja y murió cuando "una rescatista llegaba a socorrerlo".
El otro animal, que fue hallado el mismo día, "apareció muerto con las patas de atrás atadas con cables, para que no pueda moverse y muera lentamente".
La organización advirtió que "Junín es otra ciudad con galgueros, donde usan con total impunidad a los galgos para carreras y para cazar".
En ese sentido, expresó que se trata de "una ciudad netamente galguera. Con descartes diarios, carreras en sus calles, y explotación a más no poder" de los animales.
Vecinos denunciaron, asimismo, que una organización local defensora de animales "no hizo ninguna denuncia" sobre la matanza de perros manifestaron que "un cuidador del refugio, que murió en un accidente, tenía criadero de galgos".
"El veterinario del refugio también cría perros y algunos están en condiciones deplorables", advirtieron vecinos de la zona.
Asimismo, afirmaron que "un delegado gremial del municipio es uno de los organizadores de las carreras en las que explotan y drogan a los perros".
Organizaciones defensoras de animales marcharon en octubre al Congreso de la Nación para reclamar que la Cámara de Diputados sancione el proyecto de ley que prohíbe las carreras de perros en el país, aprobado por el Senado en agosto.
Las organizaciones presentaron el 25 de agosto más de 225 mil firmas, reunidas en la plataforna de Internet Change.org., en la Cámara de Diputados para reclamar que el proyecto se convierta en ley. La iniciativa aprobada por el Senado, resistida por organizadores de las carreras, prohíbe las competencias de perros en todo el país y sanciona con prisión de hasta cuatro años y el pago de multas de hasta 80 mil pesos a quien las "organice, participe o promueva".
Proyecto Galgo Argentino advirtió que los perros "viven hacinados en jaulas diminutas, son atados para realizar montas forzadas por la cría indiscriminada de la raza, son privados de sus necesidades afectivas, los transportan en baúles o cajas, reciben estimulación eléctrica, castigos con látigos y entrenamientos sádicos, perversos y sin descanso".
"La vida 'útil' es de poco menos de tres años y después de un tiempo de competir quedan completamente destrozados", advirtió la organización, y dijo que "la mayoría son abandonados o sacrificados, porque para sus explotadores, los galgueros, les generan un gasto innecesario".
Asociaciones protectoras de animales denunciaron hoy una matanza de perros de raza galgo en la ciudad bonaerense de Junín, donde uno de ellos fue hallado con signos evidentes de maltrato y otro estaba atado con cables, y acusaron a dueños de animales sometidos a competir en carreras.
Las organizaciones, que reclamaron leyes de protección, advirtieron que "los dueños de perros galgos descartan a los que ya no sirven para correr y los tiran".
La organización Proyecto Galgo Argentino informó a DyN que uno de los animales apareció en una zanja y murió cuando "una rescatista llegaba a socorrerlo".
El otro animal, que fue hallado el mismo día, "apareció muerto con las patas de atrás atadas con cables, para que no pueda moverse y muera lentamente".
La organización advirtió que "Junín es otra ciudad con galgueros, donde usan con total impunidad a los galgos para carreras y para cazar".
En ese sentido, expresó que se trata de "una ciudad netamente galguera. Con descartes diarios, carreras en sus calles, y explotación a más no poder" de los animales.
Vecinos denunciaron, asimismo, que una organización local defensora de animales "no hizo ninguna denuncia" sobre la matanza de perros manifestaron que "un cuidador del refugio, que murió en un accidente, tenía criadero de galgos".
"El veterinario del refugio también cría perros y algunos están en condiciones deplorables", advirtieron vecinos de la zona.
Asimismo, afirmaron que "un delegado gremial del municipio es uno de los organizadores de las carreras en las que explotan y drogan a los perros".
Organizaciones defensoras de animales marcharon en octubre al Congreso de la Nación para reclamar que la Cámara de Diputados sancione el proyecto de ley que prohíbe las carreras de perros en el país, aprobado por el Senado en agosto.
Las organizaciones presentaron el 25 de agosto más de 225 mil firmas, reunidas en la plataforna de Internet Change.org., en la Cámara de Diputados para reclamar que el proyecto se convierta en ley. La iniciativa aprobada por el Senado, resistida por organizadores de las carreras, prohíbe las competencias de perros en todo el país y sanciona con prisión de hasta cuatro años y el pago de multas de hasta 80 mil pesos a quien las "organice, participe o promueva".
Proyecto Galgo Argentino advirtió que los perros "viven hacinados en jaulas diminutas, son atados para realizar montas forzadas por la cría indiscriminada de la raza, son privados de sus necesidades afectivas, los transportan en baúles o cajas, reciben estimulación eléctrica, castigos con látigos y entrenamientos sádicos, perversos y sin descanso".
"La vida 'útil' es de poco menos de tres años y después de un tiempo de competir quedan completamente destrozados", advirtió la organización, y dijo que "la mayoría son abandonados o sacrificados, porque para sus explotadores, los galgueros, les generan un gasto innecesario".